NUESTRA HISTORIA
Nuestra congregación está afiliada a la Iglesia de Dios Pentecostal MI de la región Atlántico Medio. La iglesia de Dios Pentecostal inició su obra evangelizadora a fines del año 1916 en Puerto Rico.
Hoy estoy mover evangélico ha llegado a establecer obras en los países del Caribe, Centro y Sur, América, México, Estados Unidos y Europa, India, África y Australia.
Nuestra congregación local dio inicio el domingo 17 de agosto del año 2003 en un pequeño sótano en Roanoke, Virginia, con tan solo 7 personas. Desde entonces, Dios ha ido agregando a la iglesia a los que han de ser salvos. A lo largo de estos años hemos visto vidas transformadas por el poder de Dios, atormentados por el marino, siendo libres sanidades de enfermedades terminales, realizarse en el nombre de Jesús, hogares restaurados, jóvenes y niños, crecer en el conocimiento de Cristo, para luego convertirse en instrumentos útiles en la mano del señor en la expansion del evangelio.
Sabemos que todavía hay mucho trabajo por delante y estamos convencidos que nos ha tocado vivir tiempos peligrosos y finales antes de la venida de nuestro Señor Jesucristo por su iglesia. Por tal motivo seguimos compartiendo de las nuevas de salvación, arrebatando a los perdidos de la condenación eterna mientras el día dura.
NUESTRA FE
Basamos nuestra fe en la Biblia, la palabra de Dios como única fuente de dirección en la forma de adorar y en nuestro estilo de vida.
Creemos en el padre celestial como creador y sustentador de todo cuanto existe. Creemos en Jesucristo como redentor y Salvador del Hombre a través de su sacrificio en la Cruz del Calvario. Creemos en el Espíritu Santo, el cual convence al hombre de su pecado y necesidad de salvación y la transforma para poder vivir la vida que agrada a Dios.
Creemos en el padre, el hijo, Cristo y el Espíritu Santo son parte del Dios trino, el cual la duramos como único y verdadero, cuyo nombre es Jehová de los ejércitos, perfecto en unidad y propósito.
Creemos que no hay medio humano posible para hacer, salvo solamente que el hombre se arrepienta de su pecado y acepte el sacrificio de Cristo para salvación de su alma.
Creemos que nuestra victoria como creyentes está no solo en la muerte de Cristo, sino también en su resurrección, y esperamos en su promesa que después de ascender al cielo, regresará por aquellos que hubieran creído en él y su palabra para llevarlos al cielo.
Creemos en la experiencia del bautismo y los dones del Espíritu Santo. Este bautismo es poder de Dios que provocan el creyente pasión por la predicación de la palabra, acompañado de pruebas fidedignas de la obra de Dios en la vida del hombre.


Nuestra Misión
En vista de que vivimos días finales, entendemos que nuestra misión es alcanzar con el Evangelio de Jesucristo a cada habitante de este Valle de Roncal y lugares aledaños a través de la predicación de la poderosa palabra de Dios y de un testimonio veraz de la presencia en Cristo en nuestras vidas.
Nuestra Visión
Levantar una Comunidad de creyentes, adultos, jóvenes y niños que puedan reflejar de forma integrar a Cristo en sus vidas y que además, muestren un alto sentido de amor y compromiso hacia Dios, su obra y el prójimo que está a su alrededor.




Nuestros Pastores
La reverenda Laura Prado es nacida en el Evangelio en la iglesia de Dios Pentecostal MI en San José de Costa Rica trabajó para la iglesia local en San José como líder en varias áreas. Es graduada de secretariado y contabilidad comercial, como también del Instituto Bíblico Mizpa, además de recibir dos cursos misioneros en la Federacion Costarricense de Misiones (FEDEMEC).
Se desempeñó como Presidenta de la asociación de Jóvenes embajadores de Cristo a nivel nacional durante el periodo 1992 a 1996. Realizó viajes misioneros en las zonas rurales e indígenas de su país, como también a Nicaragua y Cuba.
El matrimonio Martínez Prado, se conocieron después de que el hermano Max, hondureño, llegara a recibir a Costa Rica y se casaron en el año 1998. Ambos trabajaron como líderes en varias áreas en su congregación local antes de trasladarse a los Estados Unidos en el 2003, donde luego fundaron la congregacion que actualmente ministran.
Ambos se complementan en el servicio al señor, según los talentos y dones dados por Dios, el hermano Max Martínez como Ministro de Adoración y la hermana Laura en la predicación y enseñanza de la palabra.



